Bus, bicis y atropellos

Casi muero congelada en el bus. Y luego atropellada. Todo en uno.

15 minutos de trayecto (hoy digamos que he tenido tarde libre), un conductor guapísimo y rockero puesto que estaba escuchando Ac/ dc un pelín fuerte ya que llevaba el Ipod y he escucharte parte del estribillo... O quizá llevaba el ipod demasiado flojo... no sé... y el aire acondicionado a toda hostia como en pleno agosto.

Cuando he empezado a temblar me he dicho: ¨quiero salir de este autobús ya!!¨y dos paradas más por fin salía a la ciudad de las bicis incívicas. Benvenido a Barcelona.

Me ha atropellado un bici y la muy cabrona se ha dado a la fuga, me ha dejado tirada hasta que un joven apuesto gay se ha acercado para reogerme del suelo. Resultado: un morado enorme en la pierna, y un chichón en la cabeza que la tengo helada en estos momentos, del hielo.

No he puesto denuncia pero la pondré.

Era un tía que cuando se ha tirado encima mío me grita:¨qué haces?? ¨... Y yo ya en suelo le he dicho: ¨hija de puta bajar del autobús¨ Y se ha largado.

Las bicis tendrían que pagar un impuesto de circulación y tener una mini matrícula para estos casos.

No es la primera vez que bajando del autobús me atropella una bici, la primera vez un chico guapísimo que me preguntó al menos si estaba bien y que lo sentía.

Las bicis son un peligro y todos lo sabemos, por eso el sr. alcalde ha facilitado las putas bicis, por cierto el chollo del año, a recaudar fondos para su propio beneficio, y espero y deseo que la gente que monta en ellas sea un poquito más consciente en el ¨deber de socorro¨y que vigile por donde va y sea prudente.

Barcelona is not Amsterdam que tiene unas fabulosas avenidas anchas para circular en estos trastos de dos ruedas!!!

Jones