martes, agosto 08, 2006

Podría ser una gran historia de amor jamás contada

Una mirada, una sonrisa, una desilusión, un reencuentro, un beso, un abrazo.. eso es todo lo que espero de ti.
Hará unos días me reencontré con él. Venía de hacer un largo viaje por Australia, gran Bretaña y Canadá, según él recopilando fuerzas para volver al mundo real. Nada más y nada menos tres años sin vernos. Con el dinero del finiquito de su despido pensó que lo mejor sería irse a ver mundo. Hizo los maletas en una tarde y se fue al aeropuerto, allá compró su primer billete de avión y se despidió de mi con un fuerte abrazo y un beso muy dulce en la mejilla. Me dijo: nos veremos pronto.
Siempre solía darme un beso muy tierno en la mejilla derecha, quizá una costumbre con sus padres, no sé.
Nos conocimos en una salida, yo me iba a esquiar, él era el monitor, y así surgió nuestra relación de amistad. Coincidíamos en casi todas las salidas a Andorra
Empezamos a subir juntos, cojía su coche me venía a buscar a casa y nos íbamos a esquiar, a pasar incluso algun fin de semana juntos. Solo éramos amigos, aunque yo, como siempre no estaba muy convencida del solo.
Ha sido el único chico que me ha mirado con esos ojillos tan dulces y soñadores, el único que me ha besado en la mejilla tan jugosamente, el único que me ha tratado como una princesa sin obtener nada a cambio, el único con el que una mirada valía más que mil palabras.
En su regreso estaba cambiado, llevaba el pelo más corto de lo habitual, vestía de forma muy casual, y estaba más guapo que años atrás.
- Hola princesa, como estás? Yo estoy agotado del viaje, ahora solo quiero descansar, y que me cuides, luego ya pensaremos en el futuro.
Ya pensaremos en el futuro??? Se refería al futuro juntos??
- Se te ve cansado... he reservado habitación en Hotel x para dos noches, después podrías llamar a tus padres y decirles que ya has vuelto para quedarte, se quedaron hechos polvo.
- No pienso quedarme aquí mucho tiempo más, solo quería verte, abrazarte, olerte,... casi se me había olvidado el olor de tu pelo, de tus labios...
- No me vengas con esas! porque has venido? necesitas dinero? estás enfermo? estás bien?
- Te echo de menos. Ven conmigo. Acompáñame a Melburne, allá tengo un pequeño negocio de embarcaciones de ocio, te gustará Jones.
- Joder C, ahora? ahora que tengo trabajo, ahora que estoy bien, ahora que...
- Tienes pareja?
- No ya lo sabes, que no, Jones siempre será la solterona, tú mismo me lo dijiste y así se ha cumplido.
C me llamaba Jones desde que empecé a leer hace muchos años El diario de Bridget Jones.
Me hacía mucha gracia, porque cuando leía se acurrucaba a mi lado, apoyaba la cabeza en mi hombro y me susurraba: Jones leeme en voz alta. Y mientras iba leyendo en voz alta, siempre se quedaba dormido.
- Jones, te vengo a rescatar, tal y como dices en tu blog... que lo leo todos los días. Y sabes? nunca hablas de mi... te has olvidado de mi? yo no, ven conmigo a Australia, no te arrepentirás.
Así que chicos hasta aquí puedo leer o escribir, porque me estoy pensando eso de irme a Australia. Puede ser mi tren, o no, pero lo que si puede ser es que por fin sea feliz con él, con C, con el que siempre me hace reir, me hace llorar de risa, me hace sentirme bien, y quien sabe, me hace ser la mujer más feliz del mundo.
Un salud@
Jones

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