martes, noviembre 18, 2008

Ni aquí ni allá


Tengo la cabeza qué se va ... para un lado, para el otro... son unos mareos que no creo recordar que los hubiera tenido antes.
Llevo así todaaa la mañana, he llegado tarde al trabajo, porque me he sentado en el sofá de casa esperando a que se me fueran, al menos un poco, y cuando he creído que no me desmayaría en medio de la calle, he salido pitando.
Es como si de buena mañana, en ayunas, me hubiera tomado tres tequilas y solo levantarme de la cama me hubiera subido al dragon kan... una sensación muy rara. Creo que tal vez producida por las cervicales... ayyy no sé...
Encima parezco un puto pingüino con la falda que me he puesto hoyn en qué mala hora!!!.Casi no puedo anadar a mi paso, normalmente rápido, y la obertura que hay en medio de la falda tejana cada vez me gusta menos. Aquí embutida. Qué horror!
Solo espero no encontrarme a nadie conocido con las pintas que hago hoy...
Bueno o tal vez sí...:
- Buenos días! uy te has hecho algo en el pelo? ( Mensajero)
- Hola! ay pues no sé .. tal vez el corte...
- Pues estás muy guapa...
- Ja ja ja Pues gracias!
- Hasta mañana.
- Adiós hasta mañana.
Y que conste que el mensajero está casado.. y no es para nada mi estilo.
Olé, tal vez no vaya tan mal como creía....
Pasad buen martes.
Jones

5 comentarios:

Anónimo dijo...

una pingüina muy sexy.

O.

Trasto dijo...

Me encanta Bridget jones! Yo también he leido el libro y he visto las dos pelis. Bueno de hecho tenemos gustos parecidos...love actually, sexo en nueva yotk (porsupuesto), diez razones para odiart...a mi todas esas pelis tb me gustan jeje.

Jones dijo...

O eres myu cachondo, lo sabes, no? ja ja ja....

Trasto... bienvenida al clan, de las que nos gustan esas pelis tan entretenidas y tan culturales, ja ja ja.

besos

Jones

ponleunavelaasanantonio dijo...

Querida Jones.Te noto con explosión hormonal ja,ja.Ya te he contestado en mi blog sobre que sitio es el de la foto del ultimo post.

Anónimo dijo...

Querida Jones,

No se me había pasado por la cabeza con este hombre en particular, pero sí en otras ocasiones. A veces, cuando he conocido a una persona, me he planteado cuán cercano se hará para mí en el futuro, si seríamos definitivamente amigos o por el contrario pasaría de largo como la mayoría de la gente en nuestras vidas.

No sé, querida, aún no acierto a vislumbrar el ingrediente secreto que marca la diferencia entre uno u otro caso. James, por ejemplo, cuyo destino quedó de repente adherido al mío, nunca pensé que al pedirle ayuda como traductor en aquel hotel de Praga se convertiría en un fastidio constante. Pero, ay, querida, si supiéramos estas cosas antes de que sucedieran, la vida no tendría la misma gracia, ¿verdad?

Siempre tuya,
Pamela